Bitácora Médica
- Aconsejan no subestimar las preocupaciones más comunes relacionadas con las tensiones cotidianos, ya que el corazón podría estar en riesgo
Nadie está exento a sufrir de estrés; un sentimiento de tensión física o emocional que puede provenir de cualquier situación o pensamiento que lo haga sentir frustrado, furioso o nervioso. Pero hay que tener cuidado, ya que esta respuesta emocional ante diversas situaciones puede provocar consecuencias que podrían afectar el ánimo y la salud.
De acuerdo con un artículo publicado en el portal Web de noticias La Nación (Argentina), . Ciertamente, la angustia y la preocupación consecuencias de una mezcla de incertidumbre generalizada, tensión social permanente y acumulación de tareas para trabajar más horas y sentir que el tiempo (y el sueldo) no alcanza se cuelan en los consultorios y se traducen en un riesgo cardíaco y cerebrovascular.
Ante este problema, Roberto Peidro, vicepresidente de la Fundación Cardiológica Argentina, afirma: “se está subestimando el estrés”, asimismo señala “el estrés agudo puede provocar accidentes cardíacos. Y el estrés sostenido, como el de las personas con muchas responsabilidades laborales, pero poco poder de decisión, como las gerencias intermedias, genera incertidumbre y estrés crónico. Esto provoca alteraciones arteriales que pueden llevar a un infarto.”
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Foto: Google
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